Iglesia y parroquia de Santa Marta



La iglesia de Santa Marta fue declarada patrimonio cultural de la nación por Resolución Suprema Nº 2900-72-ED de 28 de diciembre de 1972, es de estilo barroco y es uno de los monumentos religiosos del centro histórico de Arequipa.

Su historia se remonta a la construcción de la ermita de Santa Marta, que se ubicó en un inicio en la ranchería de San Lázaro y a mediados del siglo XVI, fue trasladada a las afueras de la ciudad. El 18 de junio de 1565, el cabildo acordó donarla a la Iglesia Mayor, a fin de que allí se evangelizase y se administre los sacramentos a indios yanaconas y de los alrededores. 

Muchos indios forasteros se fueron avecindando en este pago, de manera que fue menester adoctrinarlos bajo la dirección de un sacerdote. El año 1582 fue elevada a parroquia, a la que se agregó a los indios de San Lázaro.

La nueva ermita de Santa Marta se levantó en las llanuras de la entrada de la sierra, en las afueras de la ciudad y al inicio de lo que llamarían La Pampa, poco más allá de las rancherías.

El terremoto de 1582 y los subsiguientes de 1600 y 1604 destruyeron la ciudad; corriendo igual suerte la ermita de la patrona de la ciudad.


Años después a esfuerzos del corregidor de la ciudad don Juan de Mesa y Lugo y del obispo Juan de Almoguera, se construyó un templo estrenado  el 28 de enero de 1678 y culminado luego. En el rosetón de la bóveda de la actual sacristía, se lee: Año 1683.


Juan Domingo Zamácola y Jáuregui en su obra Apuntes para la Historia de Arequipa describía los daños ocasionados por el terremoto del 13 de mayo de 1784, que fueron enormes. En lo que al templo de Santa Marta se refiere, decía que parte se vino al suelo y su torre quedó muy maltrecha no habiendo otra alternativa que botarla. La capilla de la Caridad cayó al suelo enteramente con la torre que tenía.

Como los temblores se sucedían diariamente y en cantidades que varían de 3 hasta 10 por día, el 30 de mayo, por disposición de fray Miguel de Gonzáles de Pamplona, Obispo de Arequipa, el Santo Crucifijo de la Caridad fue sacado en procesión de penitencia desde la Catedral, lugar a donde fue trasladado desde el terremoto. Predicó en esa ocasión el Licenciado Bedoya, pidiendo que se hagan penitencias.

El Párroco, don Felipe Asencio Delgado, recaudó 3000 mil pesos entre los indios de las rancherías, que solían destinar para levantar los altares del Corpus Christi. Con este dinero levantó de nuevo la iglesia añadiendo una torre, levantó además la Capilla de la Caridad. Todavía se puede observar unos muros donde se halla una portada, hermosamente labrada por el lado de la calle Colón e incluso se observa parte de otra portada oculta por el Salón Parroquial. Los contrafuertes que sostienen los muros son también de la época.

Entre los sacerdotes que han servido en la parroquia de Santa Marta, se encuentra José Sebastián de Goyeneche, luego Obispo de Arequipa y Arzobispo de Lima, gran benefactor de la ciudad. También José María Carpenter, luego Obispo auxiliar de Lima.


Templo Parroquial de Santa Marta en el año de 1890. (Estas fotografías fueron tomadas por la Universidad de Harvard cuando llego a instalar su observatorio en Carmen Alto).



En 1929 monseñor Mariano Holguín encargó el cuidado de la parroquia a la Orden de Carmelitas Descalzos. Fray Gabriel de la Anunciación Garay, fue el primer religioso carmelita en hacerse cargo de la parroquia, firma su primera partida de bautizo el día 16 de marzo de 1929.

                               
Templo Parroquial de Santa Marta en el año de 1890. (Estas fotografías fueron tomadas por la Universidad de Harvard cuando llego a instalar su observatorio en Carmen Alto).

Fray Gabriel de la Anunciación Garay, fue el primer Superior Carmelita en hacerse cargo de la parroquia, firma su primera partida de bautizo el día 16 de marzo de 1929. Posteriormente llegan Fray Arturo, el hermano Salvador Ollo, famoso por la devoción con que rezaba el Vía Crucis y en las madrugadas de Semana Santa el Quinario al Señor de la Caridad.

                                 
      Vista de la Casa Parroquial de Santa Marta, inicios de 1930

Entre 1935 y 1940, los Carmelitas introdujeron modificaciones para mejorar el aspecto de la Iglesia, que hasta ese momento era de sillar. Cambiaron el estilo de la portada e incluyeron una segunda torre. Los trabajos estuvieron a cargo del maestro Pedro Pablo Martínez. En 1940 se construye el segundo piso de la casa parroquial. Luego en 1945, se renovó el atrio agregándosele una reja hecha en la maestranza del ferrocarril.

El terremoto de 1960 causó severos daños a la Iglesia, debiendo ser desmontada la torre izquierda, se demolió la bóveda de la nave hasta ese momento de sillar y se hizo una nueva de concreto armado, aumentando la altura hasta hacerla de medio punto, estos trabajos estuvieron a cargo del Ing. Cesar Díaz.

En junio de 2006, el Superior Carmelita William Bustamante Taboada OCD entregó la Parroquia Santa Marta a la Arquidiócesis, después de 77 años.

Descripción de Iglesia

La Iglesia de Santa Marta tiene forma de planta de cruz latina con una sola nave y un crucero apenas insinuado. Cuenta con una bóveda de cañón de medio punto la cual se encuentra en el crucero con una bóveda de claustro con lunetas para la iluminación del presbiterio; se apoya en cuatro arcos fajones. Estos arcos junto con la bóveda están circundados por un anillo de concreto armado.

El atrio colinda con la Plaza España, y rodea la iglesia por el frente y los costados con jardines.

Consta de dos torres de planta cuadrada, que sobresalen de la línea de fachada y están separadas del cuerpo de las torres por balaustradas a manera de balcón; el presbiterio presenta un cupulín con linternas.

En el lado del Epístola, al lado del ingreso, se encuentran dos ambientes, cubiertos con bóveda transversales a la nave: uno es la antigua ermita, convertida en la Capilla del Señor de la Caridad, la cual fue restaurada por su Hermandad en la década del 70. El otro es el galpón con un ingreso por un pasaje peatonal ubicado frente al actual Palacio de Justicia. Los muros laterales están reforzados con contrafuertes curvos, al interior de los cuales se aprecia contrafuertes rectos.

Recientemente a través del programa de Desarrollo Cultural de la Sociedad Minera Cerro Verde se pudo hacer una restauración integral de todas sus instalaciones que fueron afectadas por el terremoto del 23 de junio del 2001, trabajos efectuados de enero a septiembre de 2019.


Se venera allí al Señor de la Caridad, Patrono Jurado de Arequipa que, según la tradición fue un obsequio del Emperador Carlos V.


Venerada Imagen del Cristo de la Caridad
“Patrono Jurado de la Ciudad de Arequipa”
Fuente: Fe y Tradición