Iglesia de San Francisco.
El despertar
de la arquitectura de Arequipa se desarrolló entre 1540 a 1570, se caracterizó
por el uso de la piedra sin cantear o sillarejo con techos construidos con
madera mediante la técnica del par y nudillo, recubiertos ya sea con paja o
teja. De este periodo destacan los maestros carpinteros D. Gregorio Gonzáles,
D. Diego Martí, D. Juan Rodríguez y D. Gonzalo Álvarez. Las edificaciones más
antiguas presentan una arquitectura austera, se han hallado evidencias que
algunas fachadas estuvieron decoradas en sus dinteles con motivos caligráficos
de carácter religioso como anagramas dedicados a la sagrada familia soportados
por dos pilastras, por lo general los muros fueron hechos de fábrica de
sillarejo o adobe, las ventanas se
enmarcaban con sillares, D. Pedro Godínez maestro albañil tuvo a su cargo la
construcción de la primera Iglesia Matriz junto a D. Toribio de Alcaraz, el primero
en usar el sillar, participo de la hechura de la Plaza manchega de Alcaraz en
España, a su llegada a Arequipa tallo los Portales de la Iglesia Matriz, el Molino
San Juan, el Molino de García de Vargas Machuca en Sabandía, así como otras
obras más en Potosí, Chuquisaca y Pátzcuaro México.
A casi dos
décadas de la fundación de la ciudad se hizo una de las obras de mayor
trascendencia en Arequipa el Puente Real a cargo de D. Juan Blanco maestro
albañil y D. Bernandino de Ávila maestro carpintero, el cual también
construiría el Palacio Viejo.
Entre 1570 a
1600 en la ciudad D. Gaspar Báez maestro albañil se encargará del templo de San
Francisco, templo de un marcado carácter RENACENTISTA, quizá el único con la
métrica y las formas de este género que al igual que la fachada de la sede de
la Universidad Nacional de San Agustín o la casa del Capitán Josef Telaya y
Reguera y la Capilla de San Sebastián de Coporaque han quedado como testimonio
de una arquitectura de mayor trabajo y ordenación.
Ubicacion construcciones renacentistas.