Breve historia de la Compañía de Jesús en Arequipa
En “en carta dirigida al padre Mercurian le manifiesta que, D. Diego Hernández, vecino notable de Arequipa de la ciudad de Arequipa, influido por el capitán Gerónimo Pacheco y su esposa, doña Lucia de Padilla, habían decidido aplicar todos sus bienes a la fundación de una casa de la compañía en dicha ciudad , a cambio de lo cual solicitaban que los jesuita lo reconocieran como fundador” (Málaga 1992:1971), poco después ese año fundaron el Colegio de Santiago en Arequipa, así mismo Hernández Hidalgo por testamento dejo unas tiendas que poseía y otros enseres a favor de dicha orden. Cabe mencionar que tubo desencuentros con el Virrey Toledo respecto a su dinamismo, la labor evangelizadora con los indígenas y la intolerancia a los mestizos, que motivo se cierre el colegio, pero que se reapertura mucho tiempo después con la autorización del Felipe II por real cédula del 27 de febrero de 1582
Sufrieron el terremoto de 1582 que
destruyo las bases de su incipiente iglesia y fueron afectados por una epidemia
en 1589. Son expulsados por orden de Carlos III y
su ejecutado por el virrey Amat por real decreto y las disposiciones secretas en 1767. Se dispuso que sus bienes fueran destinados a la fundación de una universidad y colegio que no pudo ser realidad, lo que fueron dañados por el terremoto del 13 de mayo de 1784. Siendo destinado una parte del convento a favor de los niños expósitos, abriendo sus puertas el 1 diciembre de 1788, posteriormente la sociedad de beneficencia pública de Arequipa asumió la conducción como parte sus responsabilidades en su creación el 28 de octubre de 1848.
La iglesia de La Compañía
La iglesia de La Compañía, como parte del patrimonio
cultural de la nación que destaca por su estilo mestizo y barroco andino, esta
se construye a raíz de la instalación en Arequipa de la Orden de la Compañía de
Jesús en el año 1573, se crea inicialmente el Colegio del Apóstol Santiago,
luego se inicia la construcción de la iglesia y posteriormente se edificaron
los claustros, completando el conjunto arquitectónico de La Compañía.
En 1590 se inició su construcción, los terremotos
del siglo XVII determinaron que en sucesivas oportunidades se reconstruyera
hasta su conclusión definitiva en 1698.
Para su portada lateral fue diseñada y construida por el alarife Simón de Barrientos en 1654. Es original por que presenta reminiscencias de estilos anteriores. Mas su estructura física se puede decir en palabras del arquitecto Carlos Zeballos Barrios como un:
“Un frontón es muy abierto y elevado sobre el arco
de medio punto de la puerta, alberga bajo una gran concha de venera (símbolo
del santuario de Santiago Apóstol de Compostela), el bajo relieve del Apóstol
Santiago, a quien el templo está dedicado. El Apóstol aparece en actitud
guerrera, montando a caballo y con sable en alto, decapitando moros, cuyas
cabezas, junto con el emblema de la Media Luna se ven pisoteados por las patas
del caballo. Las crines del animal se desenvuelven de manera original en
grandes espirales. En la parte inferior del frontón hay una ménsula labrada,
sostenida por dos sirenas con alas de ángel.
Las columnas con capiteles corintios están decoradas
en su parte inferior con molduras en zigzag, motivo que se repite en las
columnas del primer piso de la fachada principal. Sobre los capiteles hay unos
frisos que representan al León de San Marcos y al Toro de San Lucas.
Sobre las cornisas del entablemiento, sendos pináculos producen un equilibrio armónico. En los intercolumnios podemos ver una pequeña repisa al pie de unos escudos con el monograma de Jesús (IHS) y un sencillo tema decorativo.
Son también de mencionar los casetones que adornan las jambas y el arco de la puerta, elementos decorativos más frecuentes a comienzos del siglo XVII que en la época en que se edificó la iglesia, cuando ya el barroco había sentado sus reales en el estilo arquitectónico”.
Sobre las cornisas del entablemiento, sendos pináculos producen un equilibrio armónico. En los intercolumnios podemos ver una pequeña repisa al pie de unos escudos con el monograma de Jesús (IHS) y un sencillo tema decorativo.
Son también de mencionar los casetones que adornan las jambas y el arco de la puerta, elementos decorativos más frecuentes a comienzos del siglo XVII que en la época en que se edificó la iglesia, cuando ya el barroco había sentado sus reales en el estilo arquitectónico”.
El banco central
hipotecario del Perú adquirió los claustros en 1971 y los sometió a una restauración
general, para posteriormente ser rematados públicamente. Con el terremoto de 23
de junio del 2001, se tuvo otra restauración integral y puesta en valor para su
recuperación del conjunto de la Compañía de Jesús, claustro mayor, portada
principal y la capilla de San Ignacio como la conservación de sus lienzos por
parte de la Orden Jesuítica de Arequipa (JHS), Instituto Nacional de Cultura -
Arequipa (INC - Arequipa), Escuela Taller Arequipa (ETAQP), Municipalidad
Provincial de Arequipa y la Agencia Española de Cooperación Internacional para
el Desarrollo (AECID).
Fuentes Pastor, Helard
(2018) Los jesuitas y el colegio de Santiago de Arequipa. Arequipa: Colegio San Jose, Jesuitas Arequipa.
Málaga Medina, Alejandro
(1992) La evangelización del Perú. Siglo XVI. Lima: Editorial y productora gráfica Nuevo Mundo E.I.R.L.
