Ex Convento San Nicolas de Tolentino de los padres agustinos actual Universidad Nacional de San Agustín

 

Es patrimonio cultural de la nación por Resolución Suprema Nº 132 del 16 de marzo de 1958 y Resolución Suprema 115-1959-ED del 07 de abril 1959 (rectificación) donde se declara monumento nacional el templo de San Agustín como sus “respectivo conventos, claustros y piezas que circundan al primero”, de tipo monumento religioso, de estilo neoclásico. Cuyos claustros esta dedicados al fraile agustino San Nicolás de Tolentino e la iglesia de San Agustín de Hipona, este conjunto está ubicada entre las calles "San Agustín" (antigua calle de la Universidad) y "Sucre" (antigua calle San Agustín), siendo el exconvento la actual calle Agustín 104-110.

 

Fue un edificio religioso compuesto por tres épocas constructivas virreinal, republicana y contemporánea. Esta construido en sillar, concreto, ladrillo y drywall, compuesto por estructura de muros de cajón, albañileria armada y aporticada. Sus coberturas son tipo bóveda de sillar predominante en el primer nivel, y de concreto y calamina en niveles superiores. Contiene tres claustros y dos patios, el piso predominante de estos es de sillar, piedra, canto rodado y concreto. En total el edificio cuenta con 3 niveles.



Vista de los claustros de San Agustín en 1893, notase las escaleras originales que fueron eliminados foto de Charles F. Lummins.

 

Su fundación lo realiza el padre Fr. Luis López de Solis, que eventualmente serio obispo de Quito (1592-1605), siendo su primer prior el padre Fr. Hernando de la Cruz, contando con la colaboración de los padres Diego de Lezama, Juan Moreno, Diego de Aldana y Juan de la Cuba. Cuyo costo fue de 12,400 pesos de a ocho reales. La iglesia fue inaugurada el 23 de agosto de 1574, según el fray Avencio Villarer, que lo indica en su obra “Los Agustinos en el Perú (1548-1965)”. Sin embargo, su construcción fue paralizada por el Virrey Francisco de Toledo “por no contar con licencia real; las puertas se tapiaron y las campanas dejaron de tañir” (Malaga 1990:290), pasaron 6 años y se expidió la real cédula del 5 de marzo de 1581 de Felipe II, que permitió que se reanudaran su construcción.

 

En la construcción intervinieron de manera sucesiva “los arquitectos Nicolas Alonso, Andres de Espinoza, Francisco Flores y Juan de Aldana. Parece que se concluyó en la década del 60 al 70 del siglo XVII” (Malaga 1990:290). Cabe mencionar que la misma cuadrilla que trabajo su portada principal “trabajo la portería de La Compañía y la bóveda del coro de Santo Domingo” (Bailey 2017:118). Fue afectado por el terremoto del 13 de mayo 1784.

Finalizando el proceso emancipador, se consolido un nuevo sistema de gobierno denominado “Republica”, estableciendo una nueva forma de organización socio-política, ante ello una de las figuras administrativas representativas que consolidaron Arequipa, como a otras regiones del Perú fueron los prefectos. Uno de los más resaltantes dentro de la historia de Arequipa fue el tarapaqueño Antonio Gutiérrez de la Fuente. Entre las muchas de sus obras estuvo la creación de centros educativos en la ciudad, ahí nació la Universidad Nacional de San Agustín en 1828 y el Colegio de la Independencia Americana en 1827, que respondieron a una ordenanza que remitió el Libertador Simón Bolívar, con la intermediación de Felipe Santiago de Estenos, al prefecto aprobando la constitución de los establecimientos de ciencias y artes, salubridad pública y demás. En un primer momento las instituciones representativas antes mencionadas de Arequipa funcionaron en el Convento San Nicolás de Tolentino de la ciudad de Arequipa, mediante una aprobación por parte del presidente del consejo de Gobierno de aquel entonces, Andrés de Santa Cruz, fechado el 11 de noviembre de 1828.

Anteriormente, en los ambientes del Convento San Nicolás de Tolentino funciono la primera academia de tipo universitaria denominada “Academia Lauretana”, fundada el 10 de diciembre de 1821, en honor a Nuestra Señora de Loreto. Quienes constituyeron las bases de la Academia fueron los intelectuales José María Corbacho y Evaristo Gómez Sánchez, alumnos del Seminario Conciliar de San Jerónimo fundada en 1619 por el Obispo Pedro de Perea y reorganizada en 1802 por el Obispo D. José Chaves de la Rosa Galvan y Amado, cumpliendo una labor educadora desde 1821 a 1828.

 

Vista de la calle San Agustín c.1930


La Universidad “fue reconocida como institución de instrucción superior por el presidente Orbegoso, estableciendo que podía graduar en cuatro facultades: Teología, Jurisprudencia, Medicina, y Filosofía. Tres décadas después, el 3 de febrero de 1862, se modernizo el Reglamento de la institución y estableció las facultades Teología, Jurisprudencia, Medicina, Filosofía y Letras, y Ciencias Naturales. El capítulo octavo, estableció las materias de enseñanza y el artículo 54 definió que, en la Facultad de Teología, se imparta el curso de Historia Eclesiástica, y en la Facultad de Filosofía y Letras los cursos Historia de la Filosofía, e Historia Universal”

 

En la memoria histórica de la población arequipeña, se reconoció la labor educadora, cultural y social que residió en el exconvento San Nicolás de Tolentino, el cual fue recinto de un liceo que formaron intelectuales arequipeños de gran reputación. Hoy en día funciona como un espacio académico, cultural y protocolar en custodia de la Universidad Nacional de San Agustín, siguiendo el fiel precepto educador de las anteriores instituciones representativas que ocuparon sus muros.